MAGIA ESCONDIDA
Era
hace una vez en un lugar muy lejano a la actualidad…según me conto mi tío,
existía un pueblo donde habían diversas tradiciones, costumbres y danzas, era
un lugar majestuoso en el cual todos los sueños se hacían realidad, este
paraíso contaba con todo lo que podías imaginar y estaba situado en la sierra
nororiental del estado de puebla, ese pueblo era totalmente mágico, con grandes
áreas naturales que adornaban sus alrededores dando luz, cascadas, pirámides,
grutas, e infinitos productos de la naturaleza como la gran variedad de plantas
y flores que daban vida a ese lugar, ahí existían unas hermosas aves cuyo
plumaje estaba teñido con aquel color verde brillante, impactante, símbolo de
la esperanza, abundancia e infinita vida, estas aves hacían único al pueblo, ya
que según como decían los habitantes era
una bendición de los dioses que estas habitaran ahí, porque donde cada lugar en
el cual se posaran estos hermosos pájaros, quedaría bendecido con la
prosperidad y abundancia de espectaculares paisajes hasta el fin de los
tiempos, así como también el pueblo quedaría en la eterna gloria; estos
peculiares animales que tenían por nombre “Quetzales”, eran símbolo de unión y
fortaleza, para los habitantes, cuyo canto sereno daba vida y alegría a cual rincón oscuro tenía el
pueblo, por lo cual eran llamadas “aves sagradas”, tenían en particular un gran
mensaje para las personas que vivían en el pueblo, los cuales eran los más
poderosos de aquel tiempo, hablaban un idioma especial el cual era el
“náhuatl”, eran fuertes, agiles y muy poderosos, pues podían luchar con
cualquier animal feroz que se les topaba en frente, cada uno de ellos muy
especial desde sus orígenes, ya que eran una de las culturas más prominentes de
la región y el país, dando identidad esta
maravillosa cultura dentro del estado de puebla. Me quede sorprendida del
origen de un pueblo a tal grado que no podía creer que existiera tanta belleza
y diversidad cultural por esta región, lástima que ahora gran parte este
convertido en ruinas…ahora puedo entender que es la semilla de la vida de los
pueblos aledaños a dicho lugar, así que la emoción y curiosidad emergió en mi
ser y pensamiento, ya que como nací en Zaragoza, Puebla, es decir, vivo en la
misma región donde según se encuentra
ese lugar mágico del que tanto me conto mi tío; pensé que quizás podría
descubrirlo y admirar en carne propia tan majestuosa e infinita belleza, que a
mi Estefanía Rodríguez Mirón, con la edad de 15 años, siendo de tez apiñonada,
cabello negro y ondulado, con estatura y complexión media, quisiera conocer y
saber si es que en realidad podría existir tan especial y maravilloso lugar. En
seguida le comente a mi familia sobre la inquietud que tenía y así fue como
comenzó una nueva aventura, ya que me encanta explorar y descubrir nuevos
lugares. Era un día soleado como ningún otro, único desde el amanecer, mi padre
nos despertó a mis hermanos y a mí para desayunar y emprender tan esperado
viaje, así que mi madre nos hiso el desayuno, desayunamos, posteriormente nos
retiramos a cambiarnos y arreglarnos, mi madre se bañó y arreglo, me dijo que
si le podría dar de comer a mis perros, así que en seguida corrí a traer sus
croquetas y las deposite en su plato, cuando de repente…sonó el teléfono,
entonces mi hermano contesto, había pasado algo inesperado, pues al contestar
se estremeció por completo ya que no era nadie, entonces de inmediato me
transporte a esas películas de terror que tanto me gustan, como cuando el
personaje principal está a punto de presenciar una espeluznante acción
fantasmal, la parte de la historia donde todos gritan y se tapan los ojos o
salen corriendo. Al salir de la sala me encontré con mi hermana escondida en un
rincón del patio riendo malvadamente, así que le pregunte que le sucedía, al
voltear me di cuenta que tenía su teléfono celular en la mano, entonces deduje
que era ella la que estaba llamando y colgando, pues es la bromista de la familia,
nadie se salva de una broma por parte de ella, por lo cual esta vez la víctima
era mi hermano, momentos después salimos de la casa para emprender la búsqueda
de aquel lugar tan aclamado en mi mente pues desde el día en que mi tío me
comento sobre el origen del pueblo, estuve angustiada toda la noche pensando
¿Podre conocer el corazón del pueblo ?, así que emprendimos el viaje
dirigiéndonos a la carretera, ya en camino íbamos escuchando diferentes tipos
de música (los cuales me fascinan) como: pop, rock, baladas, hip-hop, también
comenzamos a cantar para manifestar la alegría que sentíamos, lo cual como era
de esperarse no podía faltar en nuestros viajes, pues cantábamos canciones de
Luis Miguel, José José, Queen, Michael Jackson, Beyoncé, entre otros artistas,
pero yo no dejaba de pensar en que quizás ese lugar ya no existía, pues mi tío
era la primera persona que me comentaba sobre aquel paraíso, además ya no había
rastro alguno de que estuviéramos cerca de él. Cuando de repente se escuchó un
estruendo, así que mi papá de inmediato se estaciono en una parada que había en
a la orilla de la carretera, al parecer se había ponchado la llanta trasera del
auto, cuando nos bajamos mi padre comenzó a cambiar la llanta, abrió la cajuela
sacando a su vez las herramientas necesarias para que todo quedara bien con el
neumático. Al terminar, todo había salido bien, ya que pudimos retomar el
camino, en el que encontramos un pueblito abandonado, fantasmagórico sin
señales de vida, todo destruido y deteriorado, como si se hubiera sacudido el
suelo quedando prácticamente en ruinas, el cual me inundo de tristeza, al cabo
de unas cuantas horas, nos hallamos a un señor al cual le preguntamos sobre
aquel lugar, al darnos su respuesta nos decepcionamos, mis esperanzas ya
estaban por los suelos al pensar que estábamos perdidos, tras haber dado tantas
vueltas en medio de la nada, cuando por fin nos encontramos a una señora cuyo
vestuario era para mí raro, pues jamás en la historia de mi vida había visto
tal extraña ropa, así que le preguntamos si sabía dónde estaba ese pueblo tan
magnifico, ella no nos entendió pues hablaba un idioma raro, lo cual era la
señal de que ya estábamos cerca, siguiendo la ruta guiados por las
descripciones que habían, por fin encontramos un letrero que decía ”Cuetzalan” lugar de los quetzales,
así que encantada y emocionada por la situación, decidí llegar al corazón de
dicho pueblo, es decir, de donde todo surge, de inmediato nos transportamos a
otra época dejándome llevar al caminar por las calles empedradas, todas ellas
muy rusticas; al llegar al parque entre la Avenida de la Constitución, Rayón,
Guerrero y Allende, el cual abarca toda una cuadra; me encontré con un lugar
mágicamente precioso lleno de mucha cultura, al entrar por el lado de la
avenida de la Constitución halle la parroquia de San Francisco de Asís, la cual
era muy grande y con espectacular arquitectura, digna de aquel lugar
sorprendente, en frente se encuentra el tradicional palo de madera por el que
los voladores al bailar la famosa danza de los “Quetzales” se lanzan al vacío,
el piso es de piedra y además se divide en tres plantas a las cuales nos llevan
las escaleras (también de piedra), en el centro del parque está el kiosco, que
es grande, de dos pisos, tiene un barandal de fierro, está pintado de color
blanco con detalles rojos al igual que el palacio municipal ambos elaborados de
cemento, el cual está ubicado a un costado de la parroquia , entre estos en la
parte de enfrente se encuentra la torre, es grande, está hecha de cemento,
tiene incrustado un reloj cuyas manecillas son de metal, que se ilumina en la
noche, también es de color blanco con detalles rojizos. Entre los pasillos se
encuentran numerosos arbustos verdes, llenos de vida: vegetación, flora
colorida, arboles enormes, también insectos innumerables, los cuales estaban
rodeados por un cercado de cemento blanco, entre los arbustos se encuentra una
pequeña fuente; el parque cuenta con lámparas y bancas de cemento distribuidas
a las orillas de los prados, en la parte superior me encontré con acogedores y rústicos
restaurantes, en los cuales venden una variedad de deliciosos platillos regionales:
como lo que me gusta el pozole, la cecina, los tradicionales antojitos mexicanos,
etc., por otro lado, habían comerciantes ambulantes que vendían distintos
productos de ahí como: café, vainilla, canela, los cuales también se podían encontrar
en puestos establecidos en la explanada larga del parque (planta baja), también
habían personas especialmente señoras vendiendo hermosos objetos artesanales
como pulseras, anillos y collares elaborados con café pintado de diversos
colores, huipiles, servilletas, llaveros , servilleteros, diademas, blusas y
faldas, hechas de hilo con bonitos bordados hechos a mano, además de animales
esculpidos en madera. Tenía una explanada (ubicada frente a la parroquia) larga,
plana, en ella se realizan numerosas ferias como la feria del huipil y del café,
donde según sea la ocasión se colocan una gran variedad de comerciantes
ofreciendo sus productos a los visitantes. A el acuden todo tipo de persona que
quiere admirar y apreciar la belleza cultural mexicana. Razones por las que se
ha convertido en mi lugar favorito, ahora puedo creer en que a veces los
lugares especiales están más cerca de lo que creemos lástima que no los
valoramos, ¿Por qué admirar lugares de distintos países o de otros estados? Si podemos
empezar a conocer y amar a nuestra cultura regional, cientos de lugares esperan
ser descubiertos. Desde aquel día acudimos mi familia y yo a ese parque cada
vez que tenemos oportunidad, contándole a todos como lo hizo mi tío conmigo y
despertando la magia de la cultura mexicana….FIN
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